viernes, 9 de noviembre de 2012

Patatas con bacalao y huevos confitados


Ingredientes principales
Una antiquísima tribu, los Yanomanis, que habitan la selva amazónica, lugar de sudor y moscas, practican un extraño canibalismo: se comen entre todos sus propios muertos per tras reducirlos a ceniza, en una fogata que consume no sólo el cuerpo del muerto sino cuanto le pertenecía, desde el arco al sucinto taparrabos. Mezclan las cenizas con plátano y se las van tragando, a la vez que procuran olvidar el nombre del muerto, que jamás debe ser pronunciado por nadie; hay que borrar todo rastro de su ser y toda memoria de su persona, para que "el olvidado" pueda traspasar e umbral de "La casa del Trueno", es decir, el cielo, el Paraíso.

MARÍA DEL CARMEN SOLER
Gracia y justicia en los manjares

La cocina es una metáfora ejemplar de la hipocresía de la cultura porque se basa en un asesinato previo, sea de una alcachofa o de un jabalí, asesinato enmascarado gracias a la cultura, gracias a la práctica culinaria. Si el comensal muerto de hambre arrebatara la vida de un animal o de una planta y comiera los cadáveres crudos, sería señalado con el dedo como un monstruo capaz de bestialidades estremecedoras. Pero si trocea el cadáver, lo marina, lo adereza, lo guisa y se lo come, su crimen se convierte en cultura y merece memoria, libros, disquisiciones, teoría, casi una ciencia de la conducta alimentaria.

MANUEL VÁZQUEZ MONTALBÁN  
Contra los gourmets

Hoy os dejo un plato de invierno, definitivo, contundente y sabroso, mezcla de cocina clásica y 
nuevas técnicas de cocción a baja temperatura.

Grado de dificultad: Preescolares con inquietudes termonucleares

Ingredientes:
- Agua y sal
- 4 Lomos de bacalao desalado
- 1 cabeza de merluza limpia o en su defecto una pastilla de caldo de pescado
- 2 dientes de ajo
- 1 atadillo de rabos de perejil
-  los rabos de 2 cebolletas
- 2 cebolletas pequeñas picadas
- 6 patatas nuevas medianas
- 1 puñado de guisantes
- 2 huevos de granja
- Aceite de oliva virgen extra
- Perejil picado

- Pimienta negra
- 4 o 5 aros finos de guindilla
- 1 litro de aceite de girasol


Manos a la obra:
1 - Poner el Requiem de Mozart jazzeado.
2 - Colocar en una cazuela la cabeza merluza, el agua, un choro generoso de aceite de oliva virgen,  2 dientes de ajo pelados, los rabos del perejil, rabos de cebolletas y hervir a fuego lento durante 30 minutos aproximadamene, reposar y colar.
3 - Pochar lentamente la cebolleta picada con sal y los aros de guindilla, con un generoso chorro de aceite de oliva virgen.
4 - Trocear las patatas en pedazos, añadirlas al sofrito y rehogarlas durante 4 o cinco minutos.

Cocción de las patatas
5 - Cubrir las patatas con el caldo y sal, guisar durante 25-30 minutos.
Operación confitado
6 - Confitar los huevos cubiertos de aceite a 65 º C durante 25 minutos y reservar.
Judias verdes troceadas

7 - Lavar y cortar las judias verdes, eliminado las puntas y los hilos laterales, cocerlas y blanquearlas  junto con los guisantes y reservar.

Trocear el bacalo 
8 - Trocear los lomos de bacalao, echar pimienta negra o blanca y añadirlos a las patatas ya terminadas (se cocerán con el calor residual quedando jugosos).

Aspecto en a cazuela
9 - Añadir los guisantes, las judías verdes, los huevos pelados, espolvorear con perejil picado, servir y a triunfaaaar.
Presentación en plato

6 comentarios:

Juan Nadie dijo...

Muy interesantes los textos de Soler y Montalbán.
La receta tiene que estar buena (me gusta el bacalao), pero yo no pienso hacerla, que respeto muchísimo el 2º Principio de la Termodinámica.

El Requiem de Mozart es una maravilla.

Sirgatopardo dijo...

Ese es el problema de los científicos, que no
No os dejáis llevar por los placeres....

Juan Nadie dijo...

Lo que tú te crees. Los científicos, no sé, pero los seguidores de la Ciencia es que tenemos placeres mucho más sofisticados, dónde va a parar.

Sirgatopardo dijo...

¡Otro de la Iglesia del Tom Cruise!

marian dijo...

El requiem por qué ha sido, ¿por las patatas, por el bacalao o por los huevos?.
Una hipocresía deliciosa, esas patatas han tenido que coger un sabor...

Sirgatopardo dijo...

Por el bacalao, indudablemente, que ha de sufrir sacrificio y salazón...