sábado, 17 de mayo de 2014

Solomillo de cerdo al horno con Sauerkraut

Aspecto de la receta

La matanza del cerdo 
Dice un cantar: "Hubo seis cosas en la boda de Antón: cerdo y cochino, puerco y marrano, guarro y lechón."
He aquí seis maneras de nombrar al mismo animal; llamémosle como más nos guste, pero tengamos claro que, en nuestra cultura occidental, sin el cerdo no hay tocino, y sin el tocino, ¡adiós cocina! Sin el cerdo tampoco hay jamón, no hay salchichas, ni chorizos, ni salchichón, ni morcilla, ni codillo y, por consiguiente, no hay chacinería. Así de categórico es Ángel Muro en su diccionario, lleno de datos históricos sobre gracias compartidas entre el hombre y el animal.
Santi Santamaría - Palabra de cocinero

La cocina alemana
La cocina alemana ha sido muy calumniada hasta ahora. Ya se sabe que los franceses calumnian por sistema todas las cocinas, convencidos como están de que únicamente la suya merece el respeto del mundo, pero, en el caso de Alemania, se ensañaron de un modo particularísimo y no por motivos gastronómicos, sino por razones políticas. Así, por ejemplo, antes de reconquistar Alsacia, hablaban pestes de la choucroute, y después, atribuyéndole a este producto un origen alsaciano, la servían, como un manjar exquisito, en todas las brasseries de París. Lo mismo pasa con los hígados de ganso y de pato. Hasta el término de la gran guerra no los había en ninguna parte tan buenos como en las Landas. Posteriormente, en cambio, los mejores eran los de Estrasburgo. Y ya era bastante deplorable el que los franceses fuesen dándole cada vez más un carácter literario a su cocina; pero si al carácter literario añaden el carácter político, ¿adónde irán a parar?
Advirtamos, antes de pasar adelante, que la palabra francesa choucroute con que se traduce la alemana Sauerkraut revela ya toda la incomprensión de Francia respecto a la cocina alemana. Los franceses sabían que Sauerkraut significa una preparación especial de la col, y como kraut suena muy diferente a chou, pensaron: El chou (la col) debe ser eso de sauer y lo de kraut querrá decir algo así como corteza (croûte).
Pero en la Sauerkraut (no me atrevo a decir lo Sauerkraut, aunque esta palabra es neutra en alemán) no hay corteza ninguna. Kraut significa col y sauer lo que significa es agrio, precisamente al revés de como se imaginaron la cosa los franceses. No digan ustedes nunca, por lo tanto, chucrú, avalando así la traducción francesa de Sauerkraut, y si no pueden decir Sauerkraut digan saltrato o San Críspulo o aunque sea San Feliú de Guíxols, al modo de aquel catalán que, advocándose en este santo, se sirvió entera en una fonda la fuente de roast-beef, harto ya de ver como unos viajeros muy finos se habían servido las otras fuentes diciendo:
-Sans façons.
-Sans ceremonies; y
-Sans compliments.

Julio Camba - La Casa de Lúculo
       
Vamos hoy con un plato sencillo pero contundente. Basado en una receta clásica alemana, y habiendo sustituido el codillo de cerdo por solomillo, tan sólo falta acompañarlo de una jarra de cerveza fresca, para creer estar en la mismísma Selva Negra, o a las puertas del Busdestag.

Grado de dificultad: Encontrar la mostaza Löwensenf, que pica que es un primor.

Ingredientes:
- 1 solomillo de cerdo
- 2 patatas de la variedad mona lisa
- Mantequilla (mínimo una cuarta parte del peso total de las patatas)

Componentes fundamentales
- Sauerkraut a discreción
- Mostaza de la marca Löwensenf, en su defecto del tipo Dijon
- Sal y pimienta al gusto

Manos a la obra:
1 - Poner a Andrej Prozorov y Vadim Neselovskiy jazzeando a Bach.

Operación sellado
2 - Salpimentar el solomillo y sellarlo hasta que esté bien dorado.
3 - Asar en horno precalentado a 220ºC durante 15 minutos (ver punto de cocción en la fotografía).

Operación puré de patata
Puré listo
4 - Mientras tanto cocer las patatas sin pelar durante 20 minutos y una vez bien cocidas, añadir la mantequilla y la sal. Aplastar con un tenedor hasta formar un puré un tanto basto.

Operación salteado
5 - Saltear la Sauerkraut ligeramente hasta que tome temperatura.

Disposición
6 - Disponer las patas en quenelles, la Sauerkraut y la mostaza según fotografía (es una idea). Colocar los filetes de solomillo, salpimentar, servir, y a..................¡¡¡triunfaaaaaaaar!!!

7 comentarios:

Juan Nadie dijo...

"cerdo y cochino, puerco y marrano, guarro y lechón"... y también gorrino y chon, pero a mí el nombre que más me gusta es "chanchito", así en diminutivo.
Lo que nos diminutivo es el plato que has preparado. Para comérselo ya.

Juan Nadie dijo...

"nos" debería decir "no es"

Sirgatopardo dijo...

Lo de chon, en las proximidades...
No confundir con el diminutivo de Asunción o Concepción.
En cuanto al plato, es potente.

marian dijo...

Eine delikatesse.

marian dijo...

La salsa que pica (que es un primor:) creo que la probé una vez, pero no estoy segura.

Sirgatopardo dijo...

Es la mostaza más fuerte que conozco. Me encanta.

miguel dijo...

muy deliciosa receta de solomillo de cerdo al horno definitivamente la probare